¿Qué me vas a dar de comer? Las máscaras de todos tus inciensos. Yo sólo pienso en clepsidras de colores, que me acaben el tiempo entre los dientes. Sólo entre tantas espadas puede una sacar a relucir la mueca, incierta por cierto, entre hilos que la tensan. De vez en cuando siento que sólo hay sol esperando en la vereda. Y tiro los bolsos, más allá de todos mis livings, más allá de living o no living, creo que ser o no ser ya no es la cuestión. Tal vez lo sea más si apoyarme en la pintura fresca o dejarme caer, al piso, de risa, rozando apenas las rodillas, me levanto la pollera, te dejo ver lo que no quieras.
11.24.2008
Publicado por Maru en 16:54 1 comentarios
Suscribirse a:
Entradas (Atom)